Descripción En este episodio de Charlas Adictivas, dedicado a la prevención de adicciones, se presenta a un invitado muy especial: Pep, un adicto en recuperación con una trayectoria singular. Con más de 20 años liderando ceremonias de ayahuasca, Pep ha ayudado a innumerables personas, inicialmente a adictos en los años 2000 y, con el tiempo, a pacientes con enfermedades terminales, depresión, estrés postraumático y otras condiciones. Su historia es un testimonio de resiliencia, transformación y el poder de las medicinas ancestrales. Pep comparte cómo su vida se vio marcada por la adicción desde los 15 años, en los años 80, cuando comenzó a consumir heroína en los círculos de la alta sociedad de Barcelona. Lo que empezó como una experimentación adolescente se convirtió en una dependencia que lo acompañó durante décadas. En los 90, la cocaína se sumó a su adicción, profundizando su lucha. A lo largo de los años, Pep buscó ayuda en múltiples centros de rehabilitación, incluyendo varios tratamientos en Barcelona bajo la guía del reconocido Dr. Josep Mª Fàbregas, fundador del Centro de Investigación y Tratamiento de las Adicciones (CITA). A pesar de los esfuerzos, las terapias cognitivo-conductuales tradicionales no lograron romper el ciclo de su adicción. El punto de inflexión: Ayahuasca en Brasil Cansado de recaídas y sintiendo que los métodos convencionales no eran suficientes, Pep recibió una propuesta que cambiaría su vida: viajar a la selva de Brasil para participar en ceremonias de ayahuasca, una bebida enteógena utilizada por comunidades indígenas amazónicas. En el episodio, Pep describe con emoción su llegada a Brasil a principios de los 2000, donde pasó dos años inmerso en un proceso de sanación y aprendizaje. Durante este tiempo, no solo logró liberarse de su adicción a la heroína y la cocaína, sino que también se formó como facilitador de ceremonias de ayahuasca, adquiriendo un profundo conocimiento de esta planta medicinal. Pep explica que la ayahuasca, preparada a partir de la liana Banisteriopsis caapi y el arbusto Psychotria viridis, no es una "cura mágica", sino una herramienta que, en un entorno seguro y guiado, permite acceder a memorias traumáticas y emociones reprimidas. En su caso, las ceremonias le ayudaron a confrontar el dolor emocional subyacente que alimentaba su adicción, reintegrando esos recuerdos desde un lugar de paz y aceptación. Desde su regreso a España, Pep no ha vuelto a consumir ninguna sustancia adictiva, salvo la ayahuasca en contextos terapéuticos. Durante más de dos décadas, ha dirigido ceremonias que han transformado la vida de muchas personas. En los inicios, su trabajo se centró en adictos, ofreciendo una alternativa para quienes, como él, no encontraban alivio en los enfoques tradicionales. Con el tiempo, su labor se expandió a personas con enfermedades terminales, depresión severa, estrés postraumático (como veteranos de guerra o víctimas de abuso) y otras condiciones. Tanto Pep como el presentador reconocen la dificultad de transmitir la profundidad de la experiencia con ayahuasca. Pep describe las ceremonias como un "viaje interior" que trasciende las palabras, donde las visiones y emociones permiten una conexión espiritual y una comprensión más profunda de uno mismo. Aunque el tema es complejo, el episodio logra transmitir la esencia de su trabajo: la ayahuasca no es una solución universal, pero, en manos expertas, puede ser una herramienta poderosa para la sanación. Este episodio de Charlas Adictivas es un relato inspirador que combina ciencia, espiritualidad y experiencia personal. El episodio invita a la audiencia a reflexionar sobre las múltiples dimensiones de la adicción y la importancia de explorar enfoques diversos para la recuperación, siempre con responsabilidad y respeto por las tradiciones y la ciencia. ▶ Síguenos en redes sociales: → Instagram: www.instagr